Es mucho más frecuente que durante el embarazo experimentes mareos y muy importante que tomes medidas para evitar tener caídas secundarias a ellos.
Suelen presentarse más después del segundo trimestre, una vez tu cuerpo se ha logrado acostumbrar a los cambios hormonales y lo más probable es que cesaron las náuseas y el vómito del primer trimestre.
Existen diferentes causas para el que se produzcan los mareos que mencionamos a continuación:
- Si se trata de mareos en primer trimestre suele estar asociado al incremento de la hormona gonadotropina coriónica humana que genera a su vez náuseas y vómito, por lo general síntomas que se resuelven en la mayoría de mujeres en las semanas 13-14 del embarazo.
- La anemia puede ser una causa importante. Todas las mujeres en embarazo van a presentar una anemia dilucional transitoria como parte de los cambios adaptativos. Si la dieta no es balanceada, o las mujeres ya venían con anemia, los niveles de hemoglobina se van a encontrar por debajo de los valores óptimos y así generar síntomas, muchas veces manifestándose con debilidad, cansancio constante y mareo.
- Durante el embarazo la forma de respirar cambia, generando un aumento en la frecuencia de las respiraciones por minuto. El aumento de respiraciones superficiales puede generar mareo e incluso desmayos.
- El aumento del tamaño y peso uterino, genera una compresión sobre los vasos sanguíneos que pasan por tu espalda (Aorta y Cava) disminuyendo así la sangre que retorna al corazón y de ahí va al resto del cuerpo. Esta compresión se presenta más cuando las embarazadas se acuestan boca arriba o permanecen en una misma posición por mucho tiempo.
- Los requerimientos calóricos del feto harán que el metabolismo en especial de carbohidratos se haga de manera rápida, que puede generar bajas en el nivel de azúcar.
- El exceso de calor puede bajar la tensión y los cambios de posición bruscos como levantarse rápido de la cama.
Tips para disminuir los mareos en el embarazo
- Evita lugares muy calientes y con poca ventilación. Evita duchas muy calientes, saunas, baños turcos.
- Vigila tu hemoglobina, vigila tu dieta y toma medidas correctivas en caso de necesitarlo siempre con la asesoría de tu médico.
- En el momento de presentar mareo primero descúbrete si sientes calor, intenta respirar hondo y despacio, haz tu respiración consiente, sostén el aire y libéralo despacio. Toma algo frio y come algo como frutos secos para regular el azúcar de sangre. Toma las cosas con calma, asegúrate de estar antes de empezar a andar.
- Al estar en cama o trabajando se recomiendan cambios de posición frecuentes. Si trabajas sentada intenta caminar cada 1-2 horas para activar tu circulación. En la cama se recomienda más acostarse de medio lado para evitar la compresión aorto-cava.
- Al levantarse evita hacerlo de manera rápida, primero sentarse y esperar a estar segura de sentirse bien antes de ponerse de pie.
- Para evitar bajadas de azúcar importantes es importante llevar una dieta fraccionada, no es recomendable pasar más de 4 horas sin comer. Puede ayudar tomar algo pequeño antes de acostarse y justo al levantarse en la cama antes de empezar tu día. Evita comer altas cargas de dulce, lleva una dieta balanceada rica en hierro y vitaminas.
